29 de Noviembre de 2010
Hay cosas y cosas que nunca me
pediste. Tuvimos mucho tiempo para poder hablar de todos los asuntos
del mundo y resolver hasta el más complejo misterio, pudimos haber
tocado la luna en nuestra imaginación, aunque sólo fuera por un
instante.
Añoro estar asomado al balcón en una fría y lluviosa tarde de invierno al tu lado, sintiéndome empapado por cada gota y permitiendo que una sensación de escalofrío recorra mi cuerpo. Añoro nuestras peleas absurdas, compartir la misma manta cuando no haya ganas de poner la calefacción.
Todos esos momentos quedaron destrozados cuando decidiste despedazarlos. Desechaste todo lo que construimos por estúpidos enfados que no tenían ningún fundamento. Pudimos haber intentado arreglar lo que hicimos, pero optaste por huir de esta historia y dejarme a mí acabar un final que aun a día de hoy sigue abierto.
Asomado
al mismo balcón que solíamos compartir me pregunto si alguna vez
has echado de menos, aunque sea un poco, todo lo bonito que vivimos
juntos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario